Cada día más personas están concienciadas sobre la importancia de llevar un estilo de vida saludable con el fin de prevenir enfermedades, esta es la base de la medicina preventiva personalizada: ajustar la dieta en función de la genética, lo que nos permite optimizar nuestra salud. Para conseguir una alimentación personalizada que permita mejorar la salud de cada persona es necesario conocer los factores genéticos que regulan las diferentes vías metabólicas; un factor muy importante que refleja el impacto del entrono en nuestro organismo es el estrés oxidativo, que puede conducir al desarrollo de diferentes enfermedades.
El test de bienestar general evalúa diferentes vías metabólicas relacionadas con la nutrición y la genética para preservar y mejorar nuestra salud. El análisis genético determina variantes genéticas en 24 genes relacionadas con el colesterol y el perfil lipídico, la intolerancia la lactosa, la celiaquía, la sensibilidad a la sal, la metabolización del alcohol, la metabolización de la cafeína, el riesgo de osteoporosis, la detoxificación hepática, el estrés oxidativo o la respuesta inflamatoria.